En el marco de la Diplomatura en Políticas Públicas Gerontológicas  con perspectiva interseccional y de géneros de la Universidad Nacional del Chaco Austral (UNCAUS); esta semana se formalizó la conformación de la Red de Cooperativas Provinciales de Cuidado “Chaco te Cuida”. Con 10 agentes de la organización social y laboral de los cuidados posicionadas en diversas localidades de la provincia, se pretende que a partir de la corresponsabilidad con ellas, los y las personas que ejercen de cuidadores/as domiciliarios/as y/o polivalentes puedan acercarse a percibir un haber digno por su trabajo.

En este contexto, se abordó además el proyecto de ley  de régimen laboral de las personas que ejercen la actividad de cuidado domiciliario y/o polivalentes y la implicancia de la cooperativa para el desarrollo de una sociedad del cuidado. La presidenta de la Comisión de Mujeres y Diversidad de la Cámara de Diputados de la Nación, Mónica Macha, informó a Proyecto Bohemia la importancia de este proyecto para la regulación de las actividades de cuidado: “Formalizar, que puedan negociar mejor su salario, que se pueda dejar bien en claro cuáles son las tareas de una persona cuidadora y cuáles no”.

Con el objeto de “establecer el régimen que regula la actividad de las personas que ejercen de cuidadores/as domiciliarios/as y/o polivalentes” (p. 1), el proyecto de ley promueve la formalización de los servicios de cuidado y aspira a regular su prestación, para asegurar que esta área trabajadora cuente con las garantías que hagan a la dignidad profesional. “Se intenta dar a todos ellos, un reconocimiento legal para que se pueda ejercer el derecho al cuidado en todo el territorio de la república, en condiciones de igualdad y de respeto a los Derechos Humanos” (p.8).

Mucho de lo que hacemos en nuestro día a día, nuestro desenvolvimiento laboral, la posibilidad de estudiar y otra gran cantidad de actividades suelen ser posibles gracias a que hay otra persona en casa, ejerciendo las labores de cuidado. A ese infante, a ese adulto o adulta mayor y a esa persona con una discapacidad lo asiste un sector laboral profundamente desvalorizado. Ya que se olvida que son centrales para el funcionamiento social.

Las actividades de les cuidadores domiciliarios están atravesados por un profundo marco de informalidad y precariedad. “Como su actividad no está regulada, cobran salarios muy bajos, llegando a cobrar muy poco por hora y recibiendo jornadas muy extensas que superan las 8 horas”, además de que, en ocasiones, a la persona empleada se le imponen que realice otras tareas que exceden sus responsabilidades como el cuidado de la casa, según comentó la diputada. 

Por su parte, la presidenta de la institución articuladora de las cooperativas, Cristina Aboitz, señaló que estas “personas con formación gerontológica para el cuidado ganan apenas un aproximado de 10 mil pesos por cuidar a una o incluso dos personas. Un ingreso con el que es prácticamente imposible solventar necesidades básicas”, señaló.

Otro aspecto que Aboitz destacó es que “muchas familias no tienen para dar respuesta y por ende la persona mayor se encuentra en una situación de abandono. La situación empeora si tiene que ir a una institución, con un costo mucho más elevado, necesitando contar con un aproximado de 240 mil pesos”.

Más allá de la cuestión económica familiar, siempre debe considerarse el entorno más favorable para la persona cuidada. En ese sentido, Aboitiz insiste en que “es más propicio que quede dentro de su casa, en su entorno familiar, en su entorno vecinal, en su entorno de vida, con una buena cuidadora a través de una buena organización social de cuidado que le brinde la cooperativa”. De allí la importancia de la Red de Cooperativas como órganos intermediarios asociativos para que esa persona con necesidades específicas de cuidado, de con la persona profesional idónea.

Chaco te Cuida cuenta con cooperativas ubicadas en las localidades de Castelli, Miraflores, Bermejito, Colonia Elisa, Machagai, Quitilipi, Fontana, Margarita Belén y Tirol. A su vez dispone de espacios en Resistencia, junto con personal del movimiento cooperativo. Tiene como principal medio de contacto el mail de la Fundación Morena, miembro de la cooperativa: fundacionmorenachaco@gmail.com

Entre las principales  medidas que la Red pretende llevar a cabo se destaca, funcionar como un órgano intermediario entre les especialistas en cuidado y las personas empleadoras de servicio de forma asociativa y, de esta manera impulsar la bolsa de trabajo de este sector, algo que ya estuvieron llevando a cabo durante la pandemia del 2020.

De acuerdo a la experiencia adquirida, sugieren ofrecer un período de prueba y adaptación de las personas involucradas (cuidador/a y cuidada/o). 

Generar una Sociedad del Cuidado

“Estamos ante una pirámide poblacional muy envejecida, acrecentada, en donde hoy ya tenemos más mayores de 60 que menores de 4 años. Y no estamos pensando en esa franja etárea del medio que será la encargada de cuidar a esa gran población envejecida”

Cristina Aboitz, presidenta de la Fundación Morena.

La real importancia de los y las personas que ejercen de cuidadores/as domiciliarios/as y/o polivalentes es una noción que aún no está instalada en nuestra sociedad y cuya consolidación es necesaria para trabajar con perspectivas en el presente y el futuro de la población. Se hace imperioso adjudicarles el valor que merecen a este sector laboral, para fortalecer el cuidado y garantizarles condiciones de trabajo dignas.

Esto también implica reconocer la imposición histórica de estas labores hacia las mujeres a través de una lógica establecida por mandatos sociales y culturales machistas. Tal como sostiene Aboitz: “la división sexual del trabajo, que es un factor que alienta la desigualdad, es lo que de alguna manera desalienta a las mujeres porque son las que tienen a su cargo los cuidados.  De allí que se ha vuelto imperante trabajar en la deconstrucción de los roles de cuidados”.

Nada de esto podrá ser posible sin un marco legal nacional que comprometa al Estado para el cumplimiento de los derechos de cuidado. Es por esto que es tan necesario darle la atención que merecen iniciativas como el proyecto de ley, que ya ha sido presentado tres veces sin poder llegar a aprobarse. Se vuelve indispensable, entonces, pensar en un cambio cultural para avanzar en el ideal de la Sociedad del Cuidado.

“Poder pensar en la sociedad del cuidado significa para mí poder enfocarnos en un tema tan central para nuestra organización y que no está del todo visibilizado, que no está del todo valorado. Es poder darle visibilidad, propiciar las medidas y las instancias que necesitamos para que todas las personas realmente puedan ejercer el derecho a cuidar y ser cuidado, poder revalorizar el fuerte componente económico que tiene propiciar de la economía del cuidado permanentemente en todas nuestras acciones.”

Mónica Macha, presidenta de la Comisión de Mujeres y Diversidad de la Cámara de Diputados de la Nación.